Por Jeniffer Wiscovitch y Omaya Sosa Pascual | Centro de Periodismo Investigativo
El COVID Task Force de la Casa Blanca ha estado haciendo análisis semanales del estado de situación de la pandemia y emite un informe con recomendaciones a cada uno de los gobiernos estatales hace más de seis meses, pero ha dejado afuera a Puerto Rico.
Al parecer, la Casa Blanca también se olvidó de sus demás territorios: Islas Vírgenes, Guam, Samoa e Islas Marianas. Entre los cuatro territorios, viven 3.6 millones de personas.
El Centro de Periodismo Investigativo (CPI) detectó la omisión en una revisión de los informes, obtenidos y publicados por The Center for Public Integrity, y en el caso de Puerto Rico, confirmó la exclusión con el secretario de Salud de la pasada administración, el Dr. Lorenzo González Feliciano, y con el nuevo gobernador Pedro Pierluisi. Ambos indicaron a través de sus portavoces que no habían recibido informe o comunicación alguna de parte del COVID Task Force de la Casa Blanca.
Peticiones de información enviadas a la Casa Blanca, a la Oficina del exvicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, funcionario a cargo de liderar los esfuerzos COVID bajo la administración Trump, y a la Oficina de Asuntos Internos, que tuvo a su cargo el trámite de los informes del COVID para los estados, para saber por qué fueron excluidos Puerto Rico y los otros territorios, no fueron respondidas. El CPI pidió a Michael Baker, del Departamento de Salud federal (HHS), que confirmara si los informes para los territorios nunca fueron confeccionados y, de ser así, por qué, pero este refirió las preguntas a la Oficina de Asuntos Públicos de la agencia. Al cierre de esta edición, la dependencia no había respondido la petición de información.
El CPI también refirió las preguntas sobre la exclusión y si habrá cambios al nuevo COVID Task Force nombrado por el presidente Joe Biden, y aunque confirmaron recibo e indicaron que estarían trabajando en las respuestas, al cierre de esta edición no se habían recibido.
Los informes contienen información específica y analítica sobre el nivel en que se encuentra cada estado en relación a los nuevos casos y el nivel de alerta de acuerdo a la positividad. También, incluyen los condados (equivalentes a los municipios en Puerto Rico) con mayor aumento de casos esa semana y recomendaciones específicas para cada estado. El documento ofrece, además, información sobre muertes, pruebas, nuevos casos, admisiones por COVID-19 en los hospitales e información sobre el almacenamiento de suministros médicos y personal en las instituciones hospitalarias. Parte de esta información, como por ejemplo la tasa de positividad por municipio, no está pública en Puerto Rico aunque es vital para gestar y ejecutar una respuesta efectiva en contra de la propagación del virus así como la reactivación de actividades como el regreso a la escuela presencial.
Algunos informes contienen datos de las dosis de vacunas de COVID-19 distribuidas por cada 100 mil habitantes y el total y porcentaje de la primera dosis administrada en cada estado.
Al ser abordada por el CPI sobre las implicaciones de la exclusión, la Dra. Cruz María Nazario, epidemióloga y catedrática del Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico, sostuvo que es discriminatoria y significativa dado que la población de la isla está compuesta mayormente por lo que se considera a nivel de Estados Unidos minorías étnicas con el mayor riesgo de contagio y muerte por COVID-19: hispanos y afro descendientes.
“No hay justificación de no incluir a Puerto Rico en los análisis del Task Force porque la fuente de información es igual que en los estados: el Departamento de Salud de Puerto Rico y CDC. Por lo tanto, no es por falta de datos. Tampoco debe ser por el estatus político, pues Washington D.C. tampoco es estado y sin embargo es incluido”, sostuvo la Dra. Nazario.
La también investigadora, egresada de la Universidad de Johns Hopkins, indicó que no es la primera vez que se excluye a Puerto Rico de manera discriminatoria de esfuerzos nacionales de Estados Unidos relacionados a la salud pública. Recordó por ejemplo, la exclusión de la isla en la Encuesta Nacional de Nutrición y Salud (NHANES, en inglés). Otro ejemplo es que ninguno de los territorios y colonias es incluido en la encuesta de salud que desde 1999 se conduce para evaluar el estado de la salud y los factores de riesgo en Estados Unidos, sostuvo. Para los Centros para el Control y Protección de Enfermedades (CDC, en inglés) es suficiente incluir México-Americanos y una muestra de puertorriqueños de Nueva York en esta encuesta, agregó.
A pesar de la importancia de este tipo de informes para el manejo de la pandemia, la Casa Blanca ha dicho que no hace públicos estos informes porque quiere que los estados lideren la respuesta a la pandemia, según The Center of Public Integrity, entidad que los recopila y los publica.
Otro documento, titulado Informe del Perfil de la Comunidad, el que es confeccionado por un subgrupo del Task Force denominado Grupo de Trabajo de Estrategia y Ejecución de la Célula de Coordinación Conjunta de Datos, sí incluye a Puerto Rico. Este informe, producido por un grupo interagencial de agencias federales como el HHS y los Centros para el Control de Enfermedades (CDC) solo contiene datos y no análisis o recomendaciones.
Entre los datos que incluye este informe, que es actualizado diariamente, figura el número de nuevos casos y muertes en los pasados siete días, la positividad de acuerdo a las pruebas de COVID-19 hechas, el total de las hospitalizaciones por la enfermedad y la cantidad de pacientes en cuidado intensivo.
Además, el documento ofrece las ciudades con mayor aumento de casos, mortalidad, admisiones al hospital y a cuidado intensivo.
Del documento del 13 de enero se desprende que entre las zonas de mayor crecimiento de contagios entre condados, que se traduce a municipios en el caso de la isla, que tienen una población de 250 mil a 1 millón de personas figuraba el municipio de Ponce con 286 casos nuevos en los últimos siete días y 12.9% de positividad. Comparado con la semana anterior, la ciudad tuvo un aumento de más de 44% en los casos y más de 2.9% en la positividad.
En el informe del 20 de enero, Ponce también aparece como uno de los lugares con una población de 250 mil a 1 millón de personas que tienen un aumento en casos en los pasados siete días.
En un informe previo, con fecha del 12 de enero, San Juan estaba en la lista de las ciudades con más de 1 millón de habitantes con un crecimiento en el número de casos en los últimos siete días. Previo a la semana anterior, la ciudad capital reportó un aumento de un 53% en los casos.
El pasado viernes, Puerto Rico reportó la mayor cantidad de muertes por COVID-19 en un día desde que comenzó la pandemia oficialmente a nivel local en marzo del 2020, con 29 decesos. Aunque las muertes reportadas ese día ocurrieron en distintas fechas, como es usual en los informes que emite el Departamento de Salud (DS), el secretario Carlos Mellado dijo públicamente que dos ocurrieron en diciembre y el resto en enero. Al lunes habían casi 85,114 casos de contagio confirmados con pruebas PCR en la Isla, 66,352 casos sospechosos, 6,482 casos probables, y 1,778 muertes acumuladas, según el dashboard del DS.
Latinos en el nuevo Task Force
Entre los nuevos miembros del Task Force nombrados por el presidente Joe Biden figuran dos latinos y una caribeña de las Islas Vírgenes ligada a los asuntos de Puerto Rico. Se trata de la doctora Marcela Nuñez-Smith, profesora de Medicina Interna y Salud Pública en la Universidad de Yale y decana asociada de Investigación sobre Equidad en Salud en la Facultad de Medicina de Yale, especializada en atención médica para poblaciones marginadas. La doctora fue nombrada como una de las copresidentas del organismo.
Según el presidente de la Coalición Científica de Puerto Rico para atender el tema del COVID-19 en la Isla, Daniel Colón, Nuñez-Smith tiene “estrechos vínculos con Puerto Rico” y ha estado estudiando e interesada en el tema de la equidad en la salud en Puerto Rico y en las Islas Vírgenes, donde nació y se crió. La doctora también tiene proyectos de investigación en Puerto Rico, incluyendo el COVID-19, mencionó Colón a través de su cuenta de Twitter.
Los otros integrantes latinos son la doctora Luciana Borio y el doctor Robert Rodríguez.
Borio, natural de Brasil, es una doctora especializada en enfermedades infecciosas que formó parte del Consejo de Seguridad Nacional del presidente Donald Trump como miembro de su equipo de respuesta ante una pandemia hasta que Trump lo disolvió en 2018. Es vicepresidenta de personal técnico de In-Q-Tel, una empresa de capital de riesgo sin fines de lucro que desarrolla nuevas tecnologías para agencias de seguridad nacional. Rodríguez, por su parte, se desempeña como profesor de Medicina de Emergencia en la Escuela de Medicina de la Universidad de California. Creció en Brownsville, Texas, entre la frontera de Estados Unidos y México, a donde viajó el verano pasado ante el aumento en los casos de COVID-19 en esa área y la falta de médicos y recursos para atender la situación.